Internacional

Así se produjeron los sobornos en la FIFA


04 jun 2015 , 09:15

La declaración de culpabilidad de Blazer condujo al establecimiento de extenso caso de cor

El 25 de noviembre de 2013, el ahora desacreditado funcionario de la FIFA Chuck Blazer, se presentó ante un tribunal en Nueva York y se declaró culpable de 10 cargos en su contra.

 

Los documentos judiciales, que fueron hechos públicos este miércoles, muestran que Blazer admitió haber recibido sobornos de licitadores para los Mundiales de 1998 y 2010.

 

Su declaración de culpabilidad condujo al establecimiento de un extenso caso de corrupción vinculado al organismo rector del fútbol y a la presentación de cargos contra 14 personas, incluidos funcionarios de la organización y ejecutivos deportivos.

 

Lea: Escándalo de la FIFA: exdirectivo Chuck Blazer reconoció que aceptó sobornos por Mundial 2010

 

Blazer había sido desde 1997 hasta ese año miembro del comité ejecutivo de la FIFA. Antes se había desempeñado como el segundo funcionario más alto de la CONCACAF, la confederación de asociaciones de fútbol de América del Norte, Central y el Caribe.

 

Los cargos en su contra en 2013, presentados en documentos sellados, se relacionaban a eventos que involucraban "un intercambio de pagos ilícitos para un propósito u otro", en una organización -la FIFA- que el tribunal identificó entonces como una empresa RICO.

 

"RICO es un acrónimo de Racketeering Influenced Corrupt Organization (Organización Corrupta Influenciada por Asociación Delictiva)" dice la transcripción del tribunal.

 

Blazer

En 2013 Blazer se convirtió en el principal testigo de la investigación de EE.UU. sobre corrupción.

 

Posteriormente se detallan los 10 cargos contra Blazer y su admisión de culpabilidad en cada uno de ellos, los cuales formaron parte de un acuerdo con la fiscalía para disminución de su sentencia.

 

Lea: Cómo la Copa América detonó el mayor escándalo de corrupción de la FIFA

 

Admisiones

"Entre otras cosas, acordé junto con otras personas, en o alrededor de 1992, facilitar la aceptación de un soborno en colaboración para la elección de la nación anfitriona del Mundial de 1998" le dijo Blazer al juez Raymond Dearie al declararse culpable en el tribunal de Nueva York en 2013.

 

Blazer declaró que uno de los sujetos con quienes conspiró recibió un soborno en Marruecos para su licitación del torneo de 1998, que eventualmente fue otorgado a Francia.

 

El acusado también declaró: "Comenzando en o alrededor de 2004 y siguiendo hasta fines de 2011, yo y otros en el comité ejecutivo de la FIFA acordamos aceptar sobornos en colaboración para la elección de Sudáfrica como nación anfitriona del Mundial del 2010" declaró el exfuncionario de la FIFA.

 

Agregó que "él y otros acordaron aceptar sobornos y pagos 'por debajo de la mesa' en colaboración para la transmisión y otros derechos" de varios torneos de la Copa de Oro de la Concacaf en 1996, 1998, 2000, 2002 y 2003.

 

El miércoles sin embargo, Sudáfrica negó haber pagado un soborno de US$10 millones para asegurar la organización del evento en 2010.

 

Interpol

El miércoles Interpol emitió alertas de personas buscadas para dos exdirectivos de la FIFA y cuatro ejecutivos sudamericanos.

 

La admisión de Blazer de los 10 cargos en su contra, detallados en el documento judicial de 40 páginas, incluyen también evasión fiscal en Estados Unidos, lavado de dinero, fraude electrónico y conspiración para asociación delictiva.

 

Así, el exfuncionario de la FIFA, que enfrentaba entonces una sentencia de hasta 20 años en la cárcel, se convirtió en el principal testigo de la investigación, indicaron autoridades judiciales.

 

Cuando los agentes federales que investigaban la evasión fiscal detuvieron a Blazer, se informó que éste acordó cooperar con las investigaciones.

 

Parte de ese acuerdo de cooperación incluyó la grabación secreta de conversaciones en la organización.

 

Lea: Loretta Lynch y Chuck Blazer: la fiscal y el doble agente que pusieron en jaque a la FIFA

 

Aliado

Uno de los aliados más cercanos de Chuck Blazer en la FIFA fue Jack Warner, el expresidente de la Concacaf que también ha sido inculpado por las autoridades de EE.UU.

 

Warner fue detenido en su nativo Trinidad y Tobago y es requerido por las autoridades estadounidenses. El miércoles amenazó con divulgar "una avalancha" de secretos.

 

Warner

Jack Warner amenazó con revelar "una avalancha" de secretos.

 

Según documentos judiciales hay, al menos, otros dos testigos que están cooperando con la investigación en Estados Unidos.

 

Se trata de los hijos de Warner, Daryan y Daryll, quienes también eran funcionarios de la FIFA.

 

Los hermanos se declararon culpables secretamente en 2013 cuando intentaban depositar más de US$600.000 en cuentas bancarias de EE.UU. para evitar la detección de los fondos.

 

Entonces llegaron a un acuerdo para cooperar con las autoridades, según detallan los documentos judiciales dados a conocer la semana pasada.

 

Darryl Warner, quien era funcionario de desarrollo de la FIFA, se declaró culpable el 15 de julio de 2013 de dos cargos de fraude electrónico y organización de transacciones financieras.

 

Y Daryan Warner se declaró culpable el 25 de octubre de 2013 de tres cargos de conspiración de fraude electrónico, conspiración de lavado de dinero y organización de transacciones financieras.

 

Órdenes de arresto

Ahora es probable que sigan dándose a conocer detalles de la forma como se llevaron a cabo las licitaciones dentro de la organización rectora del fútbol.

 

Arrestados

Seis ejecutivos de la FIFA fueron arrestados en Zurich la semana pasada.

 

Aparte del caso que se está procesando en Estados Unidos, las autoridades suizas lanzaron su propia investigación criminal sobre los procesos de las licitaciones para los Mundiales de 2018 y 2022 en Rusia y Qatar.

 

Además, el miércoles, la Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL) emitió alertas de seis personas buscadas internacionalmente.

 

Las alertas son para el trinitario Jack Warner; el paraguayo y exmiembro del comité ejecutivo de la FIFA, Nicolás Leoz; los argentinos Alejandro Burzaco, que controla una empresa de promoción deportiva basada en Argentina, y Hugo y Mariano Jinkis, dueños de una empresa de promoción deportiva; y el brasileño José Marguilies, dueño de empresas de comunicación y difusión.

 

Las fotografías de los seis individuos que aparecen en el sitio web de Interpol indican que son buscados "por cargos que incluyen asociación delictiva, conspiración y corrupción".

 

TAG RELACIONADOS