Los 146 médicos del Hospital Baca Ortiz colgaron sus mandiles en señal de protesta.
Los 146 médicos del Hospital Baca Ortiz colgaron sus mandiles y a través de esta manifestación mostraron su inconformidad con la penalización profesional, sin embargo, la atención al público no está paralizada.
En el Hospital Eugenio Espejo los médicos se reunieron en asamblea general y resolvieron también renunciar masivamente el día que entre en vigencia el Código Integral Penal, según informo el doctor Vicente Álvarez.
Ellos tienen la esperanza de que el artículo sea cambiado y afirman no amparar la impunidad en casos de mala práctica médica y por ello proponen que se incluya esto en el Código de la Salud. Los galenos tiene la esperanza de ser escuchados tras el discurso del Presidente el sábado.
Alberto Narváez, presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, busca la apertura del Gobierno para mejorar lo aprobado por la Asamblea.
Una marcha de los médicos residentes de Quito este martes y un plantón de los galenos a nivel nacional el próximo jueves son algunas medidas anunciadas.
El descontento llega también a médicos privados como Frank Serpa,pionero en transplante de hígado en el país, explica que se siente tranquilo pero se prepara para la posible aprobación.
Esta tarde el presidente Correa en su cuenta de Twiter admitió que es "tarea difícil: conciliar los justos reclamos de las víctimas de mala práctica médica con los riesgos inherentes de la profesión, lamentablemente, cierta prensa y grupos lo que buscan es el conflicto, que nos renuncien los médicos, para ver si se perjudica el Gobierno. no importa cuántas muertes ocurran.."
Mientras tanto los gremios médicos del país están a la espera de un desenlace de este problema.