"Nunca tuvimos la oportunidad de ensayar un disparo o un tiro", señaló uno de los guardias
"Nunca tuvimos la oportunidad de ensayar un disparo o un tiro", señaló uno de los graduados de la primera y única promoción de agentes de seguridad penitenciaria que asistió a la escuela de formación de la parroquia Tres Cerritos, provincia de El Oro.
El establecimiento, considerado por el gobierno del expresidente Rafael Correa como parte de "un nuevo modelo carcelario", que funcionó por dos años cerró sus puertas en 2017 y ahora luce deteriorado.
Entre las inversiones de este espacio, se dispuso de casi 300 mil dólares para la instalación de un polígono de práctica de tiro, pero que según algunos denunciantes no se usó.
Frente a esta realidad, las nuevas autoridades de rehabilitación social, analizan la posibilidad de reabrir la escuela para cubrir la falta de personal en las cárceles aunque el único problema no es solo la afectada infraestructura.
Un grupo de habitantes, que ocupa más de 30 casas en los terrenos de la escuela, ha invadido este espacio y se desconoce qué hará el ministerio de Justicia con esas personas.