El archipiélago no pude recibir visitantes nacionales ni extranjeros.
En Galápagos la emergencia sanitaria le ha dado en el corazón al turismo. Entienden que la medida es necesaria, más aún porque en las islas no existe la infraestructura sanitaria para atender a eventuales contagiados.
En #Galápagos, el #turismo está seriamente afectado por las medidas del Gobierno para controlar el #coronavirus. pic.twitter.com/thY6Z114Z1
— Ecuavisa (@ecuavisa) March 18, 2020
Además, se realizan operativos para evitar especulación y dan resultados, los precios se mantienen y no hay desabastecimiento. Pero los locales están a media llave, no hay clientes y otros negocios sencillamente cerraron porque para qué mantenerse abiertos.
Los turistas hacen fila afuera de las oficinas de las aerolíneas buscando un vuelo que los lleve de vuelta a sus países de origen. Son dos mil extranjeros quienes estàn en el archipiélago en estos momentos y se busca facilitar su salida.
"Algunas de las embajadas quiere prestar sevricio de aerolíneas charters para evacuar a sus pasajeros desde el continente hacia su lugar de origen", indicó Norman Wray, Presidente del Gobierno de Galápagos.
Y los ciudadanos que trabajan en turismo esperan que todo pase. "La mayoría de nosotros hace 'freelance' así que pasamos a formar parte del grupo de desempleados", explica Frabizio Prado, guía naturalista.
Pero Galápagos tiene otro problem; en el aeropuerto de Guayaquil un centenar de viajeros reclamaron porque les habían cancelado un vuelo que debía llevarlos de regreso a sus casas. Es que residentes permanentes, temporales o visitantes antes de ingresar a esas islas deben cumplir un periodo de cuarentena y hacerse una prueba de coronavirus, pero ellos dicen que no tienen el tiempo, ni la plata para ello.