Conaie y Frente Unitario de Trabajadores marcharon en Quito contra las políticas del Gobierno
Las movilizaciones se replicaron en ciudades como Guayaquil y Cuenca.
El Frente Unitario de Trabajadores (FUT) y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) se unieron este miércoles en una primera movilización contra el Gobierno de Guillermo Lasso, quien asumió el poder el 24 de mayo y heredó un país en crisis.
La convocatoria de la mayor central obrera de Ecuador, a casi ochenta días de la asunción al poder del nuevo presidente, contó con la presencia de la organización indígena, que ya ha llamado al mandatario a desprenderse de la herencia política de su antecesor, Lenín Moreno.
La marcha, que transcurrió pacíficamente en Quito, salvo esporádicos forcejeos entre manifestantes y policías, fue convocada para exigir, entre otros asuntos, la derogación del decreto que permite fijar cada mes un precio nuevo a los combustibles.
- Última subida -
Justamente, la protesta coincidió con el anuncio del Gobierno de que el precio de las gasolinas Extra y Ecopaís subirán desde este jueves, a 2,28 dólares por galón, 10 centavos más que en julio y 48 centavos más que hace un año.
El precio del diesel, de gran consumo en el transporte masivo, ha pasado de un dólar en julio del año pasado a 1,60 dólares desde este jueves.
Las centrales sindicales de Ecuador tildan ese tipo de estrategias económicas de neoliberales y aseguran que forman parte de las condiciones que ha impuesto el Fondo Monetario Internacional al país desde que la administración de Moreno decidió llevar adelante un multimillonario préstamo con el organismo multilateral.
El martes, en un acto cívico-militar con motivo de la efemérides del 10 de agosto de 1809, Primer Grito de Independencia, Lasso aseguró que el país está por recibir otros mil millones de dólares "sin compromiso ni ataduras", y criticó a los grupos sociales por negarse al diálogo.
"Respetamos y valoramos a todas las organizaciones políticas y sociales de Ecuador, pero este Gobierno ha inaugurado una nueva forma de hacer política (..), siempre promoveremos el diálogo con todos pero este debe ser propositivo y jamás impositivo", fue su respuesta.
Uno de los dirigentes del FUT, Mesías Tatamuez, aseguró durante la marcha que esa central obrera no se ha negado al diálogo e, incluso, que hay un documento escrito en el que se plasma esa voluntad.
También criticó el interés del Gobierno por crear un código laboral paralelo que, según los sindicatos, podría vulnerar los derechos de los trabajadores.
Asimismo, se negó a los planes de privatización o concesiones al capital privado de empresas y áreas estratégicas del Estado, y exigió que se apuntalen mejoras en el sistema de la seguridad social del país.
- Protestas en varias ciudades -
La movilización sindical, que se reprodujo en otras ciudades del país como Guayaquil, transcurrió de forma pacífica, aunque se registró un duro incidente en Quito cuando manifestantes que forcejeaban con policías fueron atacados por canes de esa entidad.
Un reportero gráfico resultó con heridas por la mordida de un perro de la Policía, según testigos.
De su lado, el dirigente indígena Leonidas Iza, presidente de la Conaie, que desfiló junto a los sindicalistas en Quito, hizo un ferviente llamado a la unidad de las organizaciones sociales para enfrentar las políticas que se aplican en el país desde tiempos de Moreno.
En octubre 2019, un decreto presidencial de eliminar los históricos subsidios a las gasolinas provocó una masiva movilización en el que unas diez personas murieron y otras 1.500 resultaron heridas, con graves pérdidas económicas. Las protestas fueron sofocadas con la derogación de la decisión.
Iza, unos de los líderes de aquella movilización, dijo sin embargo que la de este miércoles no es una amenaza al Gobierno, que debería entender que si no se resuelvan los problemas económicos que afectan a la mayoría de la población, "habrá más reacción social".
Y reprochó a Lasso por supuestamente generar políticas que benefician a grupos pudientes.
"No se resuelve la crisis generando más crisis", añadió el líder indígena tras comentar que el incremento incesante de los precios de los combustibles es el principal detonante de la carestía de la vida.